Experiencia Formativa

La Federación Regional de Empresarios del Metal que integra a empresas que representan aproximadamente el 80% de la población ocupada del Sector Metal en la Región, ha tenido desde sus inicios una verdadera vocación por la formación y el reciclaje profesional.

La experiencia formativa de FREMM se remonta al año 1.980, fecha desde la cual se han impartido más de 2.500 cursos, seminarios y conferencias.

Fue a mediados de los años 80, cuando se produjo una auténtica explosión del sector de automoción y se demandaba la necesidad de la preparación de chapistas, pintores y electromecánicos del automóvil, y más adelante se insistió acerca de nuevas tecnologías del automóvil, en rapidísima evolución, soldadura -necesidad generada por la implantación de sistemas de calidad- carpintería metálica de aluminio y P.V.C., etc. cuando en el Sector se produjo un verdadero auge de la demanda de formación.

La respuesta a estas peticiones se articuló en forma de locales provisionales en distintos lugares del término municipal de Murcia, utilización de instalaciones de centros de formación profesional y otros. A finales de los citados años 80 hubo momentos en que funcionaban diferentes cursos en locales alquilados o cedidos gratuitamente, en la Ctra. de Alcantarilla, Ctra. de Alicante, Ctra. de Santa Catalina. En definitiva, era necesario afrontar la demanda existente buscando fórmulas que facilitasen el normal funcionamiento de las actividades formativas implantadas, junto a otras que iban exigiéndose por las empresas, y además en condiciones económicamente más viables.

La consecuencia fue la construcción de unas instalaciones (que más adelante describiremos) para la formación, sitas en Molina de Segura, que se inauguraron en 1993 y que, con el tiempo se volvieron insuficientes.

Un centro dedicado en exclusiva a la actividad formativa, tanto teórica como práctica, con una superficie de 1.400 metros cuadrados útiles, que se distribuían en cuatro talleres y ocho aulas teórico-prácticas. Con una capacidad formativa de 200 alumnos/día.
Indudablemente se está realizando una importante labor de formación técnica y profesional de la población activa del Sector Metal de la Región, principalmente de los municipios limítrofes, y por otra parte se está contribuyendo al necesario proceso industrializador, que aparte de su aportación a la riqueza regional, genera estabilidad económica y empleo.

Durante los más de 10 años en que ha venido funcionando el anterior centro han pasado por sus aulas y talleres miles de empresarios, directivos de empresas, empleados de las mismas, personas interesadas en crear su propio puesto de trabajo y centenares de desempleados, la mayor parte menores de 25 años, con un nivel altísimo de posterior inserción laboral (que se podrá cifrar como media en más del 80%), gracias a que los cursos que se han programado e impartido, lo han sido a petición de las empresas y para formar en oficios demandados por las mismas.

Todos los cursos se han realizado a petición de nuestras empresas asociadas, en los cuales han participado desempleados, trabajadores y empresarios, dependiendo del tipo de curso (reciclaje o desempleados en sus distintas modalidades).
Nuestra actividad formativa se extiende además, a la impartición de gran número de charlas y conferencias técnicas de corta duración, 3 ó 4 cada mes, habiéndose creado en el seno de la Organización una auténtica cultura por la formación.

Tradicionalmente en nuestra Región ha existido un gran déficit en la formación y cualificación de sus trabajadores. Este déficit tiene su origen en la propia estructura organizativa de la empresa del metal murciana ya que son empresas con un carácter marcadamente familiar, una dimensión relativamente pequeña y escasamente tecnificadas. Ello propició que la demanda de mano de obra cualificada en Murcia no fuera muy exigente y que por tanto los trabajadores no se haya visto obligados a formarse.

Sin embargo, hoy en día la situación ha cambiado, y las exigencias de formación, dada las nuevas tecnologías así como las nuevas técnicas empresariales, son cada vez mayores.

Igual que la demanda ha cambiado, los trabajadores se están adaptando a estas nuevas exigencias, en los últimos años hemos asistido a una verdadera revolución en la formación profesional no reglada de los trabajadores, tanto de en reciclaje profesional como en la formación de desempleados.

La implantación de nueva tecnologías en la mayoría de las actividades del metal conlleva la demanda de trabajadores cada vez más especializados. Así existe una gran demanda de técnicos especializados en las diversas ramas de la automoción, soldadores homologados en diversos procedimientos, autómatas programables, fabricación mecánica, automatización industrial, energías renovables, instalaciones de frio- calor, etc..

También se observa una mayor demanda en oficios que tradicionalmente han existido en nuestra región y que actualmente no existe suficiente número de profesionales procedentes de la formación profesional reglada debido a que no existe interés por parte de nuestros jóvenes. Tal es el caso de torneros, fresadores, rectificadores, técnicos-operadores de máquinas y herramientas en general o especialista en alguna de ellas.

Por otra parte, la empresa moderna necesita cada día más de las nuevas tecnologías en el campo de la informática y las comunicaciones para que sus productos y servicios sean competitivos, por tanto, es de capital importancia tener a un personal cualificado en estas áreas para obtener los máximos resultados de los medios tecnológicos, y así hacer de la empresa de hoy, una empresa competitiva.

Teniendo en cuenta todos estos factores, FREMM, diseña su plan de formación, intentando cubrir todas las carencias que se detectan en el Sector.

Nuestra experiencia profesional nos permite impartir cursos a cualquier nivel en estos campos, por lo que podemos garantizar seriedad, calidad, profesionalidad y efectividad en los servicios de formación que prestamos.